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Capítulo VIMEDICANDO Puesto que se trata de relacionar Medicina Floral con Astrología, en los capítulos anteriores hemos intentado de una manera somera clasificar los datos que más fácilmente nos acercan a la obtención a través del Tema Astral de los rasgos fundamentales de la personalidad de un sujeto. Hemos referenciado: Signo-Ascendente (temperamento). Posición de los Planetas Lentos (naturaleza deltrauma infantil y sus reacciones). Posición de la Luna (defensas del Yo), Análisis de los Nodos (conductas excitadas e inhibidas). Al mismo tiempo y mientras referenciábamos cada uno de estos niveles de información hacíamos alusiones que relacionaban estos niveles de análisis con la medicación floral. Tratemos ahora en la medida de lo posible de sistematizar un proceso de tratamiento floral relacionándolo con temas astrales. Evidentemente la sistematización es en si misma difícil pues aunque es cierto que el Tema Astral encierra en sí mismo la potencialidad de un sujeto, la riqueza de la manifestación externa de esas potencialidades supera a cualquier información astrológica previa. Al fin y al cabo no debemos olvidar que la información procedente de lo Astrológico maneja 12 variables del espacio (Signos) y doce variables de tiempo (posición de los Planetas y de los Nodos). Aunque las combinaciones entre si de esas variables sean numerosas, éstas no nos acercan ni con mucho a la realidad que supone la fusión Ser Humano-Universo en la medida en que este último no se acaba en las 12 parcelas de espacio estudiadas ni en los Planetas de nuestro sistema Solar; detrás de cada Signo hay unas porciones de espacio que nos resultan infinitas y cada planeta a su vez está regido por influencia del propio Universo que también se nos escapan. Así por ejemplo, sabemos que las manchas solares tienen repercusiones físicas, sociológicas y psicológicas respecto de la Tierra, pero la Astrología no matiza si en el momento de su nacimiento, un sujeto con el Sol en Libra, por ejemplo, lo hacía en un momento en que la actividad solar estuviera hiperactivada. Nada sabemos tampoco de la influencia que sobre Júpiter pueden tener los satélites de ese planeta. Insisto por tanto en que la información astrológica nos da unas líneas maestras pero siempre queda por debajo de la riqueza real del fenómeno astrológico y por tanto del Ser Humano considerado como tal. De ahí la realidad comúnmente aceptada de que no debe interpretarse una carta astral sin el contacto directo con el sujeto cuyo tema estemos estudiando. Sólo ese contacto nos permite revestir las mencionadas líneas maestras de lo que podemos llamar realidad. Las distintas etapas del proceso de medicación que vamos a señalar no son rígidas sino que deben ser intercambiables en base a la situación concreta del consultante. Y tras estas reflexiones pasemos a reseñar las etapas en cuestión, Para mayor claridad voy a ir comentando dos ejemplos concretos que nos permitirán entender mejor cuanto vayamos exponiendo. En la figura 1 aparece el tema de una mujer con 35 años que acude a la consulta para buscar apoyo en el enfrentamiento con los problemas que arrancan de una crisis sentimental. Casada con su antiguo novio al que conoció a los 17 años tiene un hijo de 5 años de edad ![]() FIGURA # 1 y una vida matrimonial presidida por la monotonía y la frialdad de su pareja, persona formal y entregada en exclusiva a su trabajo y estudio pero con una actividad frente a la vida y frente a su cónyuge describible en e! abanico que va desde los adjetivos frío a insípido . La consultante conoce a otra persona separada, con hijos, con una vibración cuanto menos más normal ante el estímulo de la Vida e inicia después de fuertes titubeos un romance que como casi siempre empieza por diversión y se solidifica en forma de enamoramiento intenso. Como siempre también la convivencia antes soportada se le hace ahora imposible: comprende que aquella decisión de compromiso suscrita a los 17 años no puede prolongarse de por siempre. Pero al mismo tiempo aparecen unos sentimientos de compasión hacia lo que ya es su expareja, de responsabilidad frente al hijo, de temor ante el «que dirán» de su propia familia ante la que ha jugado siempre un rol de niña mansa, prudente, tímida, pasiva y a la que todo el mundo pude decirle lo que debe hacer. Muchos de los sentimientos descritos anteriormente debemos considerarlos normales. Pero la angustia y la indecisión están invadiendo a la consultante de tal forma que aparece absolutamente confusa. Todo se mezcla en su cerebro; duda de la realidad de su nuevo amor; se siente aplastada por las posibles opiniones de su familia: la responsabilidad ante el niño la ahoga y sobre todo empieza a infravalorarse y a desdibujarse. Ya no es una persona abocada o enfrentada al dolor de una decisión importante sino una mujer invadida por la confusión y por la angustia. Su Tema Astral se corresponde al de la figura 1, es decir, al de una persona Leo-ascen-dente Libra. Temperamentalmente en ella se mezclan la fuerza creativa y responsable de Leo con la diplomacia y capacidad de pacto propio de Libra; su toque es efectivamente muy libriano, arropado por tanto por una actitud de suavidad que facilita su contacto. Venus en el Medio Cielo refuerza aún más las características librianas de su tempera-mento. 1. AYUDA INMEDIATA En la primera fase del tratamiento floral actúa en este caso, como parece lógico, incidiendo sobre aquello que más claramente está desarmonizando a la persona. En la Medicina Floral Rescue Remedy (RR) actúa de forma inmediata devolviéndole en pocas horas a la persona una actitud de equilibrio; este equilibrio no debe confundirse con la Armonía o Salud puesto que no resuelve los problemas internos del sujeto pero sí le permite una serenidad interior necesaria para poderse enfrentar a ellos; es algo así como el hecho de que para poder operar de apendicitis a un sujeto lo primero que se necesita, al margen de aliviar su dolor, es que el sujeto en cuestión no esté dando saltos en la camilla. En el primer contacto con la consultante del caso que estamos comentando, la tranquilizo argumentándole que nada de lo que me explica de sí misma, de sus sentimientos e incluso de sus indecisiones, es anormal. Es normal una crisis en una pareja después de 18 años ya que, en base a la juventud de quienes la componen, es previsible que cada uno haya madurado de forma diferente; es normal “equivocarse” en una decisión que se toma cuando aún somos adolescentes: es normal que respecto ¡d pasado la idea de la ruptura cree sentimientos de dolor puesto que amor y cariño no son sinónimos; es normal su búsqueda hacia una plenitud que está sintiendo, etc. Acompaño pues la fuerza de estos argumentos y medico con Chestnut Bud ( CHB). La prescripción del CHB tenía como objetivo que las ideas clarificadoras que yo estaba emitiéndole entraran con claridad en el cerebro de la consultante. La combinación RR + CHB la utilizo frecuentemente como fórmula inicial de un tratamiento para conseguir que el consultante se serene y para reforzar la claridad de captación de las primeras ideas clarificadoras que yo pueda aportarle. Téngase en cuenta que en general cuando nos vemos obligados a pedir ayuda, el miedo a uno mismo es en el fondo el sentimiento más fuerte; de ahí que todos los razonamientos que apunten hacia la normalidad del consultante resulten importantes para él; tranquilizar y reforzar la vertiente lógica de los problemas del consultante es una buena forma para conseguir la ayuda inmediata. RR + CHB por su eficacia refuerza en horas la fe del paciente en la eficacia del tratamiento. 2. MEDICANDO LAS RESONANCIAS. Casi todos los Temas Astrales tienen en sí mismos unos componentes energéticos que apuntan en la misma dirección, que hacen que la persona sea demasiado«algo». En este caso ya hemos comentado la sensación de indecisión, de ahogo ante la presión del entorno y de suavidad que ofrece la consultante, Libra en el Ascendente no sólo queda reforzado por Venus en el Medio Cielo, Venus también, como Marte en Piscis, diluye su agresividad. Asimismo la Luna en la primera casa indica que para esta ex-niña el actuar de forma espontánea era su ensueño infantil; y como los re-flejos cerebrales son carreteras de doble sentido cuando las personas con Luna en casa 1 quieren actuar libre e independientemente adoptan roles infantiles pues necesitan que los demás les autoricen a ser niños independientes. Neptuno se encuentra también en la primera casa y la interpretación de Neptuno en esta situación se corresponde en general a situaciones infantiles en las que el exniño tenía miedo a estorbar si se manifestaba de forma espontánea; la persona duda de su derecho a manifestarse pues tiene en definitiva miedo a estorbar. El Nodo Sur en Géminis y el Norte en Sagitario siguen incidiendo en la misma línea: ser correcta, cumplir de forma adecuada y formal lo establecido, relacionarse armónicamente con el entorno, tener a éste en cuenta en detrimento de sus propias convicciones; valorar más lo establecido que lo propio son las consecuencias de esta combinación de Nodos tanto más cuanto que el Nodo Sur al encontrarse en casa 9 redunda en la necesidad de aprobación o de prestigio frente a los demás. Saturno en casa 2 indica un miedo, un sentimiento de fragilidad ante la perspectiva de tener que bandearse sola ante los avatares de la vida. La Resonancia del Tema Astral de la figura 1 apunta de una forma insistente en la dirección del freno de la propia espontaneidad para contentar a los otros. Nos acercamos a un Centaury (CTY) pues este exceso de energía en la misma dirección está acercando a la persona hacia una actitud de cierto servilismo. Sin este servilismo establecido no se entiende que nuestra consultante, al fin y al cabo una Leo, haya podido resistir dieciocho años de emparejamiento que, cuando nos amplía detalles, ha estado presidido por el tedio, la monotonía, la incomunicación, y en el fondo, la soledad tísica v afectiva. 3. MEDICANDO LA LUNA. Poco a poco vamos profundizando más en la particularidad de cada persona, acercándonos más a su meollo interno. Y parle importante de ese meollo es la Luna en tanto y en cuanto ella representa la defensa que el ex-niño montó ante sus angustias. Recordemos que la Luna es el planeta rey de la época inmadura. En este caso la Luna en casa 1 y en Libra indica que esta consultante para mitigar su angustia deseaba que en su trato con los demás existiera por un lado una permanente relación de armonía (Libra) y esperaba también que los demás le concedieran algo así como permiso para actuar . Ya vimos en el capítulo IV cómo la Luna en la casa 12 no quiere nacer o crecer; en la casa I la interpretación es parecida; en la casa 12 no queremos sentirnos adultos, en la casa I no queremos asumir nuestra independencia. En definitiva, la Luna cerca del Ascendente tiene dificultades para adultizarse y en consecuencia es Walnut (WNT) la medicación adecuada. Medicando con WNT en este caso medicamos también los Nodos puesto que la persona tiene que aprender a liberarse de los prejuicios del Nodo Sur en 9 para descubrir nuevos valores de la vida (Nodo Norte en 3). 4 MEDICANDO LOS ASPECTOS DE LA LUNA CON LOS PLANETAS LENTOS. Tengamos siempre presente que el objetivo de la Luna es TAPAR la angustia procedente de los Planetas Lentos, por tanto es obvio que los aspectos entre la Luna y estos planetas son como puntales que refuerzan la actitud defensiva de la Luna; en consecuencia, para debilitar la sujeción de la persona a la Luna habrá que debilitar esos puntales. En este caso el aspecto duro más claro que incide sobre la Luna es el de Neptuno que se encuentra en conjunción con ella y en su misma casa. La interpretación de esta conjunción es siempre la de irrealidad, irrealidad que incide tanto en la concepción de la persona sobre sí misma como en la concepción de la vida en general. Luna en conjunción con Neptuno tiende a construirse un mundo ideal en donde todo debería ser maravillosamente perfecto; con esta conjunción, quienes la tienen flotan en un mundo más parecido a un cuento de hadas que a una realidad. Es evidente que se hace necesario conciliar a la persona con la realidad y que por tanto será necesario medicar con Clematis (CLTS). 5. MEDICANDO LOS PLANETAS LENTOS. Poco a poco nos vamos acercando al núcleo que negativiza a la persona, es decir al origen del trauma que mientras Sea sentido como tal es el que moviliza todas las energías que inciden en la fase inmadura. En este caso dos de estos planetas (Plutón y Urano) se encuentran en el cuarto cuadrante, posición típica que se corresponde a los embarazos no esperados, En concordancia con lo dicho, nuestra consultante es la quinta hija de un matrimonio de una clase socio-económica media; y la hermana que le antecede tenía un síndrome de Dawn. En estas condiciones es prácticamente imposible que la madre viviera lo que iba a ser su quinto embarazo de forma acogedora. Para nuestra consultante su primera evidencia existencial, que hubiera debido ser la plena calidez del vientre materno. estuvo enrarecida y en su proyección hacia la globalidad de su vida posterior va a temer que esa experiencia se repita: por tanto va a temer que la vida no actúe nunca con ella como un vientre acogedor: temerá que todo aquello que para los demás resulta sencillo y premiador sea para ella negado. En definitiva, tiene miedo a no merecer la felicidad. Aquella niña que dudaba de su derecho a existir (posición de Plutón y Urano) tiene además Neptuno en casa 1 del que hemos hablado al comentar que en esta posición la persona tiene miedo a estorbar. Si nuestro trabajo está bien hecho, a medida que vayamos debilitando la Luna y sus puntales empezará a aflorar la presencia descarada del trauma infantil. En este caso observaremos la coincidencia de Urano y de Plutón en la misma casa que el Sol, que por otra parte se encuentra en Leo. Así pues, aquella mujer Centaury, sumisa y hasta cierto punto servil empezará a dar paso a unas explosivas actitudes de rebelión y de autoafirmación (Sol-Plu-tón y Sol-Urano). Toda la fuerza contenida de su Sol en Leo empezará a manifestarse a través de actitudes cada vez más reivindicativas y hasta, si se quiere, violentas. Hasta ahora Sol-Urano la habían convertido en una mujer nerviosa pese a su aparente toque de suavidad; y hasta ahora también la fuerza explosiva de Sol-Plutón que empuja a la persona a autoafirmarse se había canalizado por la Luna; simplificando, su medio de autoafirmación era ser muy buenecita. Ahora, al debilitarse la Luna su autoafirmacción pasará incluso por la impositividad. Evidentemente hemos recorrido ya un largo camino y aquella persona sumisa y comprimi-da empieza a manifestarse como rebelde y explosiva; y evidentemente la energía se está canalizando mejor, Sin embargo, va a recibir fuertes críticas por parte de su entorno que ya la tenía encasillada como pasiva y sumisa y en el fondo algo de razón tendrán puesto que la energía está liberándose pero no está todavía armonizada. Esta armonización se producirá cuando el Sol en Leo la convierta en una entusiasta lideradora de grupos de tipo lúdico; cuando Urano pase de ser rebelde a creativo y cuando Plutón vire desde la explosividad a la intensidad; en definitiva cuando se convierta en una mujer capaz de comunicar a los demás la alegría de vivir puesto que nadie mejor que aquel que dudó del derecho a vivir para paladear el goce de la vida. Tendremos pues que frenar las primeras reacciones de Sol-Urano y Sol-Plutón moderándolas con Vine (VN) y Vervain (VRV). 6. EMPUJANDO LOSPLANETAS LENTOS HACIA LA PLENITUD. En general cuando medicamos de acuerdo con lo señalado en el párrafo anterior, es decir, cuando frenamos la reacción de salida de los Planetas Lentos ya desprotegidos por una Luna debilitada, el sujeto tiende por sí mismo a armonizarse. No olvidemos que como toda manifestación energética el Ser Humano tiene un impulso natural hacia la plenitud de la misma forma que pocas cosas necesita una planta para alcanzar su pleno desarrollo si la hemos abonado, regado y colocado en una situación climatológica favorable. En este caso pues, una vez frenada con Vine y con Vervain !a reacción agresiva, que ya hemos comentado anteriormente, la persona tenderá por sí misma a positivizar estos dos Planetas Lentos situados en el cuarto cuadrante conviniéndolos en Profundidad (Plutón) y Creatividad (Urano) a la hora de gozar de las caricias de la Vida. Sin embargo, en esta fase final yo acostumbro a proceder de la siguiente forma: a. Rescue Remedy + Wild Oat -í- Walnut.
Evidentemente Wild Oat y Walnut facilitan tanto el cambio interno como la ruptura con los viejos patrones de conducta. La adición de Rescue Remedy en el inicio de esta última fase se justifica porque la entrada de la persona a una nueva forma de vivir en la que la Luna no ejerce una función Falsa pero al fin y al cabo protectora e ilusionante, sumerge a la misma en una cierta sensación de zozobra; algo así como lo que siente el individuo que tras una prolongada lesión en una pierna tiene miedo a andar sin bastón. Capítulo VIIJERARQUIZACIÓN DE LAS ETAPAS Reconstruyamos la lista de las etapas de medi-cación que hemos señalado en el capítulo anterior: 1. Ayuda Inmediata. 2. Medicación de las «Resonancias». 3. Medicando la Luna y los Nodos. 4. Medicando los aspectos de la Luna con los Planetas Lentos. 5. Medicando los Planetas Lentos.
Si hacemos una traducción psicológica de estas etapas veremos que en realidad hemos estado haciendo un recorrido típico de cualquier Proceso Analítico. De entrada hemos procedido a tranquilizar al paciente y a darle unas perspectivas de esperanza: a continuación hemos deslindado a través de las «Resonancias» las características carac-terológicas que al ser reforzadas por las psicológicas crean una situación de exceso, Hemos iniciado posteriormente los primeros pasos para desenganchar al paciente de las Defensas del Yo, haciéndole ver la naturaleza e inutilidad de sus corazas defensivas: hemos seguido hurgando, buscando la interrelación entre las Defensas del Yo y los Traumas profundos que originan y apuntalan esas Defensas; por último hemos enfrentado el Trauma profundo compensando las reacciones e inseguridades que inicialmente se producen cuando la persona se libera del Trauma: y, en resumen, hemos dejado abierto el camino para que todas las potencias internas del sujeto se armonicen movilizándose en su vertiente positiva. Naturalmente estoy explicando en estos capítulos la utilización de la Medicina Floral en un proceso de Terapia Analítica aunque el objetivo real sea el de relacionar Medicina Floral con Astrologia. Pero es que donde mejor puede valorarse el lenguaje de la riqueza astrológica es precisamente cuando esta se proyecta en el campo variado y rico de la Personalidad Humana. Aun cuando es posible y frecuentemente útil mezclar en una sola dosificación varios elementos florales, lo que conviene es entender qué es lo que estamos medicando. Así por ejemplo, en el caso que hemos comentado las etapas 2 y 3 pueden medicarse juntas puesto que el Centaury que se dibuja en esa personalidad aplastada se compagina con el Walnut, propio de la Luna en el ascendente. En otros casos es posible medicar a la vez las etapas 3 y 4, es decir, a la Luna por un lado y a los Aspectos de la Luna con los Planetas Lentos por el otro. Esta mezcla de las etapas estará naturalmente en función del proceso de armonización del paciente. Pero considero especialmente útil medicar aisladamente y en solitario a los Planetas Lentos. Capítulo VIII MEDICACIÓN DE ALGUNAS POSICIONES PLANETARIAS TÍPICAS A modo de orientación establezco ahora una lista de Medicaciones Florales que se corresponden a determinadas posiciones planetarias. Pero debe tenerse en cuenta la elasticidad con que es preciso actuar; la aplicación matemática de esta tabla es poco conveniente. En los textos clásicos de Medicina Floral se señala un grupo de Flores que tienen funciones catalizadoras, es decir, que son útiles para que detrás del marasmo confuso de una situación afectiva alterada se dibuje el fondo real del problema interno del consultante. Wild Oat, Chestnut Bud, Agrimony, Crab Apple, son las flores que más claramente se asocian a esa función catalizadora. Pero he observado que, en el fondo, cualquier flor cumple esa misma función puesto que al medicar para buscar la tantas veces citada Armonía del paciente .vasuperando un síntoma para ir acercándose al foco provocador de su desarmonía. Así, puede suceder que esa persona que sufre por los demás de forma desmedida y a la que se le prescribe Red Chestnut, la eficacia de esa medicación haga surgir el foco profundo que alimentaba ese sufrimiento. La persona puede poner al descubierto que su actitud Red Chestnut (RCH) es una progresión de un sentimiento propio de fragilidad o miedo ante la vida, propio de un Mimulus; puede suceder que el RCH encubra un deseo de provocar admiración, con lo que iremos a parar a un Larch en correspondencia con Planetas Lentos en el segundo cuadrante; asimismo el RCH de referencia puede encubrir un deseo de dominio sobre los demás que se corresponde a unos Planetas Lentos en el tercer cuadrante, propios de un Vine; y por último, ese mismo RCH puede ser una angustiante forma de pedir amor y convertirse en un Chicory, propio de Planetas Lentos en el cuarto cuadrante. Y es que no olvidemos que cualquiera de las múltiples formas de manifestación de una dcsarmonía tiene como sustrato último el fallo o la amenaza a nuestros instintos de Amor, de Conservación, de Autoestima o de Utilidad. En mi opinión existen cuatro medicamentos últimos a los cuales vamos a parar en la fase final de un proceso, y ello de acuerdo con la siguiente tabla: 1.1. Planetas Lentos en primer cuadrante. Miedo- . Aspen-Mimulus. 1.2. Planetas Lentos en el segundo cuadrante. Infravaloración. Larch 1.3.Planetas Lentos en e tercer cuadrante . Inutilidad. Vine. 1.4.Planetas Lentos en el cuarto cuadrante. Soledad afectiva. Chicory Pasemos ahora a las posiciones de la Luna y sus correspondientes compensaciones Florales: 2.1.Luna en el medio cielo. (C 9 - 10) . Deseo de prestigio. Walter Violet. 2.2. Luna en ascendente (C.12-1) Miedo al cambio. Walnut. 2.3. Luna en bajo cielo. (C 3-4) Deseo de simpatía. Agrimony. 2.4. Luna en el descendente. Deseo de ser tenido en cuenta. Centaury. En este segundo cuadro conviene diferenciar con claridad las interpretaciones de la Luna en cada uno de sus puntos clave. Está claro que la Luna en el ascendente (2.2) intenta de alguna forma «no crecer», seguir comportándose como un niño o un joven. La Luna en el B.C. (2-3) se corresponde a la posición en la que el niño salta desde la exploración de su entorno vivencia! al deseo de ser aceptado por ese mismo entorno (salto del primer al segundo cuadrante). Con acierto se dice que con la Luna en el B.C. deseamos ser «el Rey de la casa». Necesitamos pues admiración y aplauso. En la posición opuesta a la anterior, es decir, con la Luna en el Medio Cielo lo que buscamos no son aplausos sino prestigio; viramos desde el deseo de ser el infantil «Rey de la casa» al superadulto «Rey del entorno». En el B.C. la Luna pide que le rían las gracias; en el Medio Cielo la Luna necesita que los demás, por así decirlo, escuchen con la boca abierta nuestras sentencias. Con la Luna en el Descendente buscamos sencillamente que los demás nos acepten como adultos; mientras en el M.C. la Luna es capaz de vivir en relativo aislamiento acumulando sabiduría, en el Descendente la Luna necesita contacto humano, necesita que le necesiten: y por tanto trata siempre de hacer o decir aquello que su interlocutor o compañeros desean que se haga o que se diga. Naturalmente en las posiciones intermedias de la Luna respecto de los ejes del Tema Astral las interpretaciones deben «promediarse». Capítulo IX MEDICACIÓN DE LOS ASPECTOS DE LOS PLANETAS LENTOS A LA LUNA Ya hemos comentado en el capítulo IV cómo los Aspectos de los Planetas Lentos con la Luna significan la clara repercusión en nuestro inconsciente de nuestras frustraciones profundas que son las que en último extremo debemos resolver. Pero revisemos por un momento la interpretación psicológica de los Planetas Lentos por sí mismos en sus respuestas ante las frustraciones de Desamor, Desprotección, Déficit Admirativo o Inutilidad (cuarto, primero, segundo y tercer cuadrante respectivamente). Ante esas frustraciones que la posición de los Planetas Lentos indican, éstos mismos reaccionan en cada caso según el siguiente esquema: Plutón-Persistencia. Urano-Rebeldía. Neptuno-Culpa. Como observamos Plutón y Urano crean respuestas ásperas, son por así decirlo exacerbantes. Por el contrario, Neptuno crea respuestas disolventes, debilitantes. Por tanto divido los Aspectos en dos cuadros, el primero para Plutón y Urano, y el segundo para Neptuno. 3.1. Luna en el M.C. aspectada con Plutón y Urano. Impatiens y Rock Water. 3.2. Luna en el ascendente aspectada con Plutón y Urano .- Wild Oat y Chestnut Bud. 3.3 . Luna en el B.C. aspectada con Plutón y Urano. Heather y Holly. 3.4 . Luna en el descendente aspectada con Plutón y Urano . Willow y Vervain. 4.1. Luna en el M.C. aspectada con Neptuno. -Clematis. 4.2 . Luna en el ascendente aspectada con Neptuno. Honey Suckle. 4.3. Luna en el B.C. aspectada con Neptuno. Pine. 4.4. Luna en el descendente aspectada con Neptuno. Elm. Capítulo X ANÁLISIS DE UN SEGUNDO CASO: FRACASO Y ACIERTO Revisemos ahora un caso cuyo comentario nos permitirá en mi opinión no sólo repasar los conceptos hasta aquí expuestos, sino que por sus especiales circunstancias nos aclararán mejor el funcionamiento o la interacción de la Medicina Floral respecto del Ser Humano. Trabajemos pues el Tema correspondiente a la Figura 2. ![]() Se trata de un consultante de 37 años que acude a la consulta en un fuerte estado de agitación. Según él, tiene miedo a hacer disparates; a veces le asalta el temor de si podría tirar a sus hijos por la ventana cuando se enfrenta con unos niños que son de naturaleza movida y revoltosa: asomarse a espacios abiertos no sólo le produce vértigo sino que le asalta la duda de si aparecerá en él la tentación de lanzarse al vacío; persona dedicada al estudio de temas esotéricos siente con frecuencia la sensación de que «algo» o que «alguien» le observa o se mueve a su alrededor pareciéndole intuir pasos, sombras o presencias. Su estado se corresponde a un nivel de agitación bastante intenso y, por otra parte, se trata de una persona que aparentemente respira optimismo y vitalidad muy cercana a una personalidad Agrimony. Según él, su malestar se dispara desde mayo del presente año (1991) sin que, pese a preguntárselo expresamente, parezca haber nada que durante esas fechas pueda haber provocado la aparición de su crisis. Siguiendo el esquema reseñado en el capítulo VII procedo u medicar con Cherry Plum y Aspen, acompañándolos, como siempre, con Rescue Remedy. El resultado es escaso y no se registra apenas mejoría pese a la claridad aparente de la descripción de sus síntomas (miedo a hacer disparates y miedo a los espíritus) Este fracaso indica que la causa real de su angustia y su visita, es otra, y que para realizar su rescate es preciso atacar en otra dirección. Revisemos pues a fondo su biografía: esta se corresponde a la de un niño con una estructura familiar algo peculiar. En primer lugar y por razones laborales la Madre era la que trabajaba fuera de casa mientras que el Padre realizaba su trabajo sin salir prácticamente del hogar. Esta circunstancia produce una inversión de roles muy poco frecuente si nos situamos en el contexto de treinta años atrás. En segundo lugar, cuando nuestro consultante tenía tres años se produjo el fallecimiento de su hermano menor (dos años y medio de diferencia de edad). Por último y hasta los once años el interesado fue un niño de salud quebradiza, víctima de frecuentes trastornos y enfermedades. Naturalmente esa salud infantil precaria va a producir dos efectos; para unos padres que ya han perdido un niño, cada enfermedad de su hijo superviviente tenía que suponer, lo expresaran o no, una vivencia angustiante. Para aquel niño estar enfermo no era sólo una molestia sino que era algo percibido por él como un gran riesgo; en realidad vivía inmerso en una amenaza permanente. Pero es que ademán la frecuencia de sus enfermedades dificultaban su escolarización; era siempre el niño desfasado y no fue nunca capaz de crear un núcleo de amigos y camaradas. Por añadidura, esas enfermedades podían tener como base algún tipo de trastorno tiroideo puesto que su crecimiento era inarmónico, con lo cual físicamente se sentía también un niño diferente. El secreto del análisis psicológico en profundidad está precisamente en lo que ahora vamos a comentar: ¿Qué concepción de la vida y de sí mismo puede forjarse el cerebro de un niño para el cual sus primeras experiencias existenciales se corresponden a las situaciones antes descritas? Porque para ese niño la vida era ser más frágil de lo que parecían ser los demás, era vivir permanentemente sumergido en una amenaza flotante de muerte, era sentirse desplazado y diferente respecto de los demás; era sentirse objeto de miradas o comentarios burlones; era ser extraño y burlable en su físico, en su rendimiento y en su propia estructura familiar. La respuesta de ese cerebro ante esa situación existencia! la vemos claramente reflejada en su Tema Astral; su complexión es la de un Aries-Géminis que combina vitalidad con curiosidad y ese conjunto activo queda potenciado por Júpiter en la casa 1. Su contacto es efectivamente el de una persona decidida, activa, inquieta y expansiva. Pero sobre esa realidad genética se dejan sentir los efectos de aquella experiencia infantil evidentemente dura; Plutón y Urano se sitúan en el primer cuadrante; tiene miedo y aunque se rebela ante su propia fragilidad (Urano en C.2) la exploración del mundo, la salida hacia afuera le produce una reacción paralizante (Plutón en C.4). Naturalmente teme no tener nada presumible dentro de sí mismo (Neptuno en C.5) y tiene miedo a su fragilidad física (Saturno en C.6). Ante la presión de sus angustias llega a la conclusión de que la vida en su realidad es dura, y reacciona deseando que el mundo no sea como es (Luna en conjunción con Neptuno), y deseando que él mismo pudiera llegar a ser un personaje destacado en un mundo teórico, armónico e ideal (Luna conjunción Neptuno en C.5 y en Libra). Hasta el momento en que acude a la consulta su vida ha sido un esfuerzo por encontrar ese mundo teórico en el campo del esoterismo, de la propia Astrología,de la numerología, incluso de la poesía y del arte. El trabajo y los roles desempeñados como pareja y como padre eran simples actividades cotidianas sin contenido: su motivación interna, lo que en realidad le hacía vivir era la búsqueda de ese mundo irreal. Pero en realidad vivía encerrado en una concha protectora de ilusiones (Nodo Sur en C.2) sin atreverse a darse y a fundirse con la realidad de la vida (Nodo Norte en C.8 y Capricornio). Pero a sus treinta y siete años esa búsqueda permanente de un mundo irreal se iba viendo quebrada una y otra vez por una realidad desilusionante; detrás de los esotéricos, de los magos y de los videntes, de los proféticos compañeros de aspiraciones irreales se encontraba con una evidente falta de rigor; y se encontraba también con los egoísmos las envidias y las miserias. La realidad iba, por otra parte, apretando, sus hijos le planteaban problemas; su pareja se incomunicaba; el mundo social y laboral imponía su ritmo, su competitividad su agresivi-dad y su materialismo descarnado. En realidad venía a verme porque en el fondo la esperanza de encontrar la armonía en un mundo teórico se estaba desvaneciendo. Su Luna estaba amenazada; y naturalmente al agrietarse sus defensas empezaban a desenterrarse los sentimientos infantiles de miedo, amenaza y muerte. Comenté al consultante cuál era su situación real y para él entender su situación fue una experiencia tranquilizadora y positiva. Siendo persona altamente sensitiva (Luna, Neptuno en C.5 y en Libra) le recomendé que escribiera al menos una vez a la semana una composición sobre la poesía de la realidad porque ese mundo áspero a cuya realidad le tenía miedo estaba también cargado de luz y de calor; los niños eran transparentes e ingenuos; y detrás de cada adulto se escondía una profunda ansia de Amor, de Protección, de Admiración y de Solidaridad: le señalé que para describir todo eso sólo tenía que mirar con menos miedo el mundo real del que trataba de huir. Y naturalmente cambié la línea de medicación. Su Luna en el segundo cuadrante y su genética vitalista aconsejaban Agrimony: su Luna en conjunción con Neptuno, es decir, su refugio en un mundo teórico apuntaban claramente hacia Clematis: y para facilitar la comprensión de la causa y proceso de su trauma receté Chestnut Bud. El proceso de hacer las pases con la realidad se produjo con gran rapidez. Al debilitarse la Luna tal como señalábamos en el capítulo VII los miedos aparecieron con fuerza pero con diferencias importantes: El interesado tenía miedo a hacer disparates en el sentido de que aparecía en él una especie de tentación a destruirse; como si el vacío despertara en él la tentación de lanzarse al mismo; aparecieron síntomas de claustrofobia en autobuses, metros, etc. Y al mismo tiempo el consultante me comentó que desde siempre tenía pre-vención a mirarse al espejo, y que para él, el hacerlo resultaba siempre incómodo. Me indicó asimismo que en un par de ocasiones en que haciendo relajación había tenido la sensación de ,salirse del cuerpo había experimentado una gran sensación de poder, de libertad y casi de omnipotencia. Un intento de medicar con Cherry Plum (miedo al descontrol) resultaba infructuoso. Pero con un poco de reflexión las cosas se aclararon rápidamente con ayuda del Tema Astral: en realidad aquel niño no sólo había vivido inmerso en un mundo de miedos indefinidos (el temor de sus padres ante las enfermedades) sino que había odiado a su cuerpo. Su cuerpo débil, enfermizo y extraño era el culpable tanto de sus temores personales como sociales. Todos hemos contemplado cómo un niño pequeño puede emplear largo tiempo contemplando extasiado el movimiento de la mano o el pie: y es que para ese niño la mano o su pie son todavía cosas ajenas a él; son cosas exteriores a él. El niño en su proceso de integración de su propio Yo, integra también su propio cuerpo; tiene que aprender que aquel es su cuerpo. Y para este niño su cuerpo era motivo de rechazo. En realidad habrá reaccionado ante su cuerpo de una forma muy lógica; supongamos que a un niño le regalamos una bicicleta para que comparta excursiones y paseos con sus amiguitos supongamos también que esa bicicleta se le estropea y desmonta con facilidad provocando no solo el aislamiento sino también las burlas de sus compañeros. ¿Qué sentirá ese niño? Sentirá un profundo descontento, una rebelión interna hacia su bicicleta, rebelión que extenderá hacia sus padres responsables de su compra; sentirá una profunda necesidad de cambiar de bici-cleta y un frecuente deseo de tirarla por un barranco, y sentirá una profunda vergüenza a salir con esa bicicleta; y si no puede cambiarla y se ve obligado a salir con ella se sentirá prisionero de su bicicleta. Esos mismos sentimientos de rebelión, de rechazo hacia la bicicleta ante la fragilidad de ésta por sentir injusta la circunstancia de tenerla (Urano en Casa 2, cuadratura con Luna), la exigencia interna de poder tener una bicicleta con la que poder ser como los demás y el deseo de destrucción de esa bicicleta, de vencerla, de escapar de su dominio dominándola, eran los sentimientos que aquel niño había acumulado hacia su propio cuer-po. Eran pues sentimientos Vervaín (rebelión, injusticia) y sentimiento Vine (respuesta sádica hacia su propio cuerpo). La medicación con Vervain y Vine acompañada de Chestnut Bud (visión clara de su problema) diluyó la situación angustiante en pocas semanas. Ahora empezaba el proceso de empujar a esa persona hacia su plenitud, de liberar sus energías para que pudiera desarrollarse su personalidad vital y curiosa (Aries ascendente Géminis), para que dedicara sus energías, evidentemente capaces de enfrentarse a situaciones difíciles (Urano en C.2). a desarrollar la fe y la confianza que produce el propio conocimiento y la fe en sí mismo (Plutón en C.2), a usar su sensitividad ayudando a los demás a encontrar sus propias sensitividades (Luna conjunción Neptuno en C.2) y en definitiva, a dar el salto que va desde vivir asustadamente cobijado en un mundo de ensueño a una capacidad de participación con el mundo real (Nodo Norte en Capricornio). Y esa positivización, y esto es lo importante, se producirá sola, cuando la Medicina Vibratoria a través de Clematis primero, liberando su Luna, y de Vine y Vervain fecundando a sus Planetas Lentos liberen a su organismo de las trabas de sus miedos infantiles. La exposición algo prolija de este caso queda justificada porque pone de relieve la finura con que trabaja la Medicina Floral en ese proceso de su actuación íntimamente ligada con lo emocional. Recordemos que la medicación Aspen y con Cherry Plum había fracasado; y ello era así porque la claridad con que el paciente exponía sus síntomas (miedo a algo «confuso» y miedo a hacer disparates) no se correspondía a la realidad; la realidad consistía en un rechazo, en un odio, en la expresión de un sentimiento de injusticia por sentirse encerrado en un cuerpo que para él era la causa de sus frustraciones. Sólo suavizando el deseo de imponerse sobre la limitación de su cuerpo, por una parte, y la necesidad de rebelarse ante él mismo permitió la entrada, ahora sí con eficacia, de Mimulus (un Planeta Lento en el primer cuadrante) y de Iarch (dos Planetas Lentos en el segundo cuadrante) como fase final del tratamiento. Pero es que además, cuando ya nos encontrábamos en esa fase final el paciente, que no encontraba ninguna circunstancia exterior que justificara la aparición de su crisis, recordó que ésta empezó a manifestarse cuando en un chequeo de rutina le fue detectada una hipertensión medicable. Fue ese nuevo choque con su cuerpo imperfecto y el paulatino fracaso de su búsqueda de un mundo y de una autoimagen irreal, las circunstancias que removieron el precario equilibrio de las Defensas internas del consultante. Y al mismo tiempo se ponía en evidencia la capacidad desbloqueante de la Medicina Floral que le permitía recordar ahora detalles que su cerebro trataba de borrar. Capítulo XIRECLASIFICACIÓN PSICOASTROLÓGICA DE LAS FLORES DE BACH En los capítulos VIII y IX y a través de 4 Tablas hemos codificado elementos florales de acuerdo con posiciones planetarias según el siguiente esquema: TABLA 1 Medicación Floral según la posición de los Planetas Lentos. TABLA 2 Medicación Floral según los aspectos de la Luna. TABLA 3 Medicación Floral según los aspectos de la Luna con Plutón y Urano. TABLA 4 Medicación Floral según los aspectos de la Luna con Neptuno. Ordenados los elementos de Bach de acuerdo con estas cuatro tablas, queda cubierto un espectro de 21 elementos quedando de alguna forma pendientes de clasificación 17 elementos mas. Estos elementos restantes pueden a su vez subdividirse en dos grupos: Medicaciones para situaciones reactivas. Medicaciones para déficit caracteriológicos permanentes. En cuanto a las Medicaciones REACTIVAS estas serán las que parecen necesarias cuando una situación sobreexcitada del entorno de forma objetiva produzca una respuesta lógica del organismo. En la Tabla 5 recojo las llamadas Medicaciones REACTIVAS en las que agrupo 12 de estos 17 elementos a los que antes me refería. Pero con todo y con ello y salvo en situaciones muy especiales, si pretendemos llevar un tratamiento de Medicina Floral hasta sus últimas consecuencias, denominadas situaciones REACTIVAS deben ser miradas con sospecha. Así por ejemplo es cierto que la Monotonía Vital puede producirnos fatiga (Hornbeam), pero ¿hasta qué punto la incapacidad de la persona para salirse de su Monotonía no pone en evidencia una debilidad interior? ¿Hasta qué punto no estamos, en el fondo, ante un Cerato y un Scleranthus?, y a su vez ¿hasta qué punto la duda del Cerato y Scleranthus no se apoya en uno de los cuatro sentimientos básicos que se corresponden con la Tabla 1? La única forma de despejar la duda acerca de si la aparente respuesta REACTIVA está limpia de contenidos más profundos es, naturalmente, preguntar al consultante si el tipo de respuesta que tratamos de compensar se ha dado de forma más o menos similar en otras circunstancias hasta cierto punto semejantes. En cualquier caso paso a reseñar estas mediaciones descritas como REACTIVAS:
Naturalmente por eliminación nos quedan aquellos elementos que combaten lo que podríamos llamar «tendencias constitutivas», y cuyo contenido es el siguiente:
Capítulo XIICLARIFICACIONES No debemos olvidar que Edward Bach buscaba a través de la Medicina Floral la respuesta a un concepto nuevo y fundamental de la Medicina: para él la enfermedad no era más que la expresión corporal de un trastorno emocional sostenido. De ahí que el tratamiento de lo emocional tiene que producir a la larga la curación de lo físico pero las teorías de Bach llegan más allá que el hecho de interconexionar los mundos emocionales y físicos. De hecho Bach funde esos mundos. Así por ejemplo el Crab Apple cuya función es la de limpiar, es capaz de actuar en tres planos diferentes: en el mental cuando nuestro cerebro se ve ensuciado por pensamientos negativos: en lo sentimental cuando ríos sentimos ensuciados por pulsaciones de vergüenza hacia nosotros mismos: y por último, en lo físico en situaciones de infección. De hecho pues un trastorno será como una especie de vibración negativa, vibración que puede alojarse en el plano puramente físico, en el afectivo o en el cerebral. Estos conceptos anteriormente expuestos explican una serie de observaciones que la Medicina Tradicional va paulatinamente constatando: Se entiende así el por qué las terapias Conductistas son extraordinariamente peligrosas en la medida en que eliminan la manifestación vibratoria de un trastorno en el campo emocional (superación de una fobia, por ejemplo), con el riesgo evidente de que esa vibración se traslade al plano intelectual o físico, En la obra titulada LA ENFERMEDAD COMO CAMINO* sus autores relacionan la correlación existente entre las distintas enfermedades, localizadas estas en distintos niveles de la estructura corporal, con la estructura de fondo de la personalidad del sujeto que sustenta a la enfermedad misma. Un individuo, por ejemplo, de personalidad dominante, que actúa en la vida como queriendo estar en todas partes a la vez como mecanismo de lucimiento de sí mismo, y que hace por lo tanto de su motilidad un mecanismo del que abusa para sentirse diferente de los demás, acaba padeciendo trastornos articulares (artrosis, artritis reumatoide) que acaban inmovilizándole. Es como si al negársele el cuerpo a aceptar su condición de «igual que los demás», se hubiera negado a vivir la vida con una motilidad normal en vez del inquieto y exasperante movimiento al que somete a su devenir vital; y aquello que el cerebro no hizo acaba haciéndolo el cuerpo, dramatizándolo en forma de enfermedad. Nuevamente tenemos aquí la manifestación en distintos planos de la misma vibración negativa, Y puedo asegurar que las distintas interpretaciones que sobre las distintas enfermedades que se realizan en la obra antes mencionada me impresionaron porque mi experiencia que empieza ya a ser larga en el tiempo iba ratificando una y otra vez la realidad de aquellos contenidos interpretativos. Si la Astrología me proporcionó una pauta segura a la hora de buscar las Defensas del Yo y de la Frustración Profunda , la Medicina Floral proporciona el medio para modificar las vibraciones negativas pasándolas del cuerpo a la emoción, de la emoción a la inteligencia y de la inteligencia a la superación. * LA ENFERMEDAD COMO CAMINO, por Thorwald Dethlefsen y Rudiger anike. Editorial Plaz y Janés |