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Procesos de aprendizaje: Desarrollo de habilidades comunicativas

Curso 1º - 1º semestre – 2014-2015

Grado en Magisterio de Educación Primaria

Profesora Dr.ª D.ª Mª Isabel Pérez Jiménez
Tema 2. La lengua como competencia
Esquema de contenidos
1. La competencia lingüística

1.1. La competencia gramatical

1.1.1. La noción de nivel de representación

1.2. La competencia pragmática y sociolingüística

1.3. La relación entre lengua y comunicación desde este punto de vista

2. La competencia comunicativa

2.1. La definición de competencia comunicativa

2.2. Historia del concepto competencia comunicativa

2.3. Componentes de la competencia comunicativa

3. Bibliografía citada en estos apuntes y bibliografía adicional


TEMA 2. LA LENGUA COMO COMPETENCIA
1. La competencia lingüística
En el Tema 1, definimos lengua como el objeto mental que todo niño adquiere en virtud de poseer de forma innata la facultad del lenguaje. La lengua es el estadio final de desarrollo de la facultad del lenguaje, y se desarrolla (se adquiere) mediante la combinación de aspectos innatos y de la exposición del individuo a un entorno lingüístico en el que se habla una lengua natural. 1 Ese objeto mental se denomina competencia lingüística (que es por tanto un sinónimo de ‘lengua’ en el sentido en que venimos definiendo este término). Así, decir que un individuo ha adquirido una lengua equivale a decir que ha adquirido competencia lingüística. La competencia lingüística es, por tanto, un sistema de conocimiento interiorizado que posee el ser humano o, dicho de otro modo, una representación mental compleja.
La competencia lingüística (o sea, ese sistema de conocimiento o representación mental compleja de la que acabamos de hablar) incluye varios subcomponentes o subcompetencias:
-Competencia gramatical: el conocimiento de las unidades lingüísticas y las reglas gramaticales de la lengua (el conocimiento que permite que el hablante forme secuencias fonólógica/fonética/morfológica y sintácticamente bien formadas de su lengua: La niña pequeña baila; *pequeña la baila niña). Este término competencia gramatical fue acuñado por Chomsky (1965).2

-Competencia pragmática/sociolingüística: el conocimiento de cómo usar la lengua apropiadamente en situaciones concretas, o, dicho de otro modo, el conocimiento de cómo comportarse lingüísticamente de forma apropiada en distintas situaciones comunicativas –dependiendo del interlocutor, situación, lugar, finalidad, etc.–.
Date cuenta de que el término competencia comunicativa, que quizá conoces, no ha aparecido aún. El motivo es que en la bibliografía no hay una noción unívoca de lo que es competencia ni tampoco del concepto de competencia comunicativa (o competencia en comunicación lingüística). Por ello, iremos definiendo los conceptos paso a paso. Hasta este momento, hemos ofrecido una definición de competencia lingüística entendida como sistema de conocimiento y hemos señalado que la lengua, entendida como competencia, integra dos (o tres) subcompetencias: gramatical y pragmática/sociolingüística. En primer lugar explicaremos en qué consisten estas subcompetencias. Después nos centraremos en el concepto de competencia comunicativa y expondremos cómo surgió históricamente este concepto y los distintos modos en que se ha definido y entendido.
1.1. La competencia gramatical


  • Vamos a preguntarnos ahora lo siguiente ¿Qué implica ‘saber hablar’ una lengua? ¿Qué ‘sabe’ el hablante nativo de una lengua? Por una parte, conocer una lengua implica:




  • El conocimiento de los sonidos de la lengua: Todo hablante de una lengua conoce

  • qué sonidos forman parte de su lengua y cuáles no: [ʃ]

  • qué combinaciones de sonidos o signos son posibles y cuáles no: *Bfota

  • en qué posiciones pueden aparecer cada uno de los sonidos


lengo, jumba

mfumo, gjuhë
[Utilizamos el asterisco * para indicar que una palabra o secuencia no son posibles en una lengua. El asterisco no quiere decir que una palabra o secuencia no exista pero pudiera existir (por ejemplo, podemos inventar palabras: rumiadora “máquina para triturar tabaco”), ni tampoco quiere decir que sean formas vulgares y no se deban usar. Lo que significa el asterisco es que las reglas de nuestra lengua no pueden producir esa palabra o secuencia]


  • El conocimiento de las palabras de la lengua:

  • Todo hablante de una lengua conoce que ciertas secuencias de sonidos están asociadas a ciertos significados (palabra). Cuando no se conoce una lengua las palabras y oraciones son incomprensibles y solo se percibe una cadena no segmentable de sonido. La causa es que la relación entre las secuencias de sonido y los significados que representan en una lengua es arbitraria y válida solo para esa lengua.

  • Todo hablante también tiene un conocimiento tácito sobre los mecanismos de formación de palabras en su lengua. Sabe qué palabras son posibles en su lengua y cuáles no (esto es, qué combinaciones de morfemas son posibles y cuáles no). Esto indica que tenemos un sistema internalizado de reglas que se ocupan de la formación de palabras aun cuando seamos incapaces de expresar dichas reglas (recuerda la regla por la que los niños forman los participios, como vimos en el Tema 1).


cobrador “el que cobra”, bebedor, trabajador

En español si añadimos -dor a un verbo, obtenemos un nombre con el significado “la persona que V”.

¿Es gramatical inteligentador? ¿Por qué?


  • El conocimiento sobre la formación de oraciones:

- Todo hablante reconoce oraciones bien formadas de su lengua. Así, la gramática mental de toda lengua incluye restricciones inconscientes sobre la formación de oraciones (reglas mentales).
*Casa la es bonita.

El cataplán del osaco cacileó hasta quintalearse.

*Juan toca el trombón todas las fiestas en.
- Todo hablante conoce y sabe cómo construir la “estructura sintáctica” de la lengua.
Ejemplo. Sabemos que algunas oraciones son “ambiguas” (o sea, que pueden tener más de un significado): Hable a los estudiantes de historia. Cualquier hablante nativo de español comparte la ambigüedad de esta oración aunque no la haya oído antes.

- Significado 1: “Hablé a los estudiantes sobre historia”

Hablé [a los estudiantes] [de historia]

Les hablé de historia

- Significado 2: “Hablé a los estudiantes que están en la asignatura de historia”

Hablé [a los estudiantes de historia]

Les hablé (a los estudiantes de historia)


  • Conclusión: Esa “sabiduría” o “conocimiento lingüístico interiorizado” que los hablantes poseen de forma inconsciente en relación con los sonidos/las palabras/la formación de oraciones de su lengua se denomina competencia gramatical (o gramática mental de una lengua). La competencia gramatical está estructurada en niveles de representación.


1.1.1. La noción de nivel de representación


  • Cuando un hablante escucha la siguiente secuencia sonora ()... 3


['piðenřeaβili'tarlaes'kwela'konřoe'ðores] (transcripción fonética, AFI)
…lo que llega a su oído es una onda sonora continua (esto es, no hay pausas en la onda sonora): (oscilograma extraído con Praat)



¡Pero esto no es lo que su cerebro "escucha"!
Todo hablante de español es capaz de:
a) Reconocer una serie de palabras en esa secuencia (es capaz de segmentar la secuencia sonora continua). Asumamos que una palabra es una asociación entre un sonido o secuencia de sonidos (un significante) y un significado. Esa segmentación en palabras NO está en la cadena sonora que llega a nuestro oído. Esa segmentación es posible porque el hablante posee un ‘lexicón mental’ donde están almacenadas esas palabras y es capaz de identificarlas en lo que oye:

piden / rehabilitar / la / escuela / con / roedores
(recuerda, además, que el hablante es capaz de segmentar las palabras en unidades sonoras discretas: los sonidos/fonemas)
b) Asignar una estructura a esas palabras (establecer relaciones sintácticas entre esas palabras), y además, extraer un significado asociado a esa estructura. Piden rehabilitar la escuela con roedores tiene dos lecturas, es ambigua. La oración puede significar que se quiere rehabilitar la escuela que tiene ratas, o bien que se quiere rehabilitar la escuela usando ratas. ¿Cómo podemos explicar este hecho?
Para explicar que la oración tenga dos significados hay que recurrir a la noción de estructura de constituyentes (estructura de sintagmas, estructura de frases), a la noción de sintaxis.

-"Piden rehabilitar la escuela que tiene ratas"  piden rehabilitar [la escuela con roedores]OD

-"Piden rehabilitar la escuela usando ratas"  piden rehabilitar [la escuela]OD [con roedores]CC
-Cuando la escuela y con roedores forman parte de un mismo constituyente, se pueden sustituir ambos por un pronombre: ¿Qué van a rehabilitar?

-Cuando la escuela y con roedores no forman parte de un mismo constituyente, pueden, por ejemplo, alterar su orden en la oración: rehabilitar con roedores la escuela


Por lo tanto:

  • Para explicar la ambigüedad que todo hablante detecta cuando oye el estímulo sonoro (la señal) que antes hemos escuchado, hemos tenido que recurrir a algo no directamente observable en la secuencia sonora: la unidad palabra, la estructura de constituyentes (y la hipótesis de que el significado de las oraciones se construye a partir de la estructura sintáctica, principio de composicionalidad).

  • Tanto la segmentación de la cadena sonora en palabras, como el establecimiento de relaciones sintácticas entre ellas y la computación del significado de la oración completa entre las palabras son operaciones mentales. La noción de palabra es un objeto mental, y la estructura sintáctica es otro objeto mental, no están en el estímulo externo. Forman parte de nuestra competencia gramatical.

  • El cerebro maneja objetos mentales (representaciones mentales) que no están en los estímulos que recibimos. Un ejemplo de objeto mental relacionado con el sistema visual:


triangulo creado por el sistema visual



  • La lengua es un objeto mental que se estructura en niveles. Esos niveles de representación son parte de la competencia gramatical del hablante, no son meramente niveles de estudio/análisis que aparezcan en los libros de texto. Son psicológicamente reales aunque sean inconscientes. Y son universales, en el sentido de que la competencia gramatical (o gramática mental) de todos los hablantes de cualquier lengua se organiza en esos mismos niveles, cada uno de los cuales posee unidades propias y un sistema de reglas para combinarlas (sistema combinatorio discreto).


Los niveles de representación son los siguientes:
Fonética-Fonología: componente encargado de la estructura de sonidos de la lengua.

Morfología: componente encargado de la estructura interna de las palabras.

Sintaxis: componente encargado de la estructura de los sintagmas de la lengua (y de su combinación en oraciones y textos).

Semántica: componente encargado de construir el significado descriptivo de los sintagmas (y de las oraciones y textos).
Además, debemos suponer que el hablante cuenta con una especie de diccionario mental:

Lexicón: diccionario mental del hablante. Repositorio de unidades léxicas (asociaciones 'significado-significante').
Cada uno de estos niveles maneja un conjunto finito de unidades propias y también un conjunto finito de reglas combinatorias y restricciones:
Fonética-Fonología: unidad: sonido/fonema

Morfología: unidad: morfema

Sintaxis: unidad: sintagma / oración / texto

Semántica: principio de composicionalidad
OJO: cuando hablamos de reglas en los párrafos anteriores no estamos hablando de reglas que vienen impuestas desde el exterior, como decretos prescriptivos o normativos que sea necesario aceptar y cumplir para hablar bien, sino que son regularidades que emergen de la manera en que los hablantes utilizan un inventario finito de unidades y un conjunto finito de pautas combinatorias para producir e interpretar un conjunto infinito de secuencias.
1.2. La competencia pragmática y sociolingüística
Pero ese sistema de conocimiento que hemos llamado lengua incluye también un conjunto de pautas y de rutinas de comportamiento lingüístico que determinan la adecuación de la producción lingüística a ciertos parámetros extralingüísticos (situación comunicativa). Dicho de otro modo, el conocimiento de una lengua incluye la capacidad de adecuar el comportamiento lingüístico a parámetros externos, relacionados con el uso del lenguaje en actos de comunicación particulares, concretos, y social e históricamente situados.4
Conocer una lengua exige, por tanto, ajustar el comportamiento lingüístico a las condiciones que determinan lo que es conversacional y socialmente adecuado. El conocimiento interiorizado de las pautas que rigen ese ajuste se denomina competencia pragmática y competencia sociolingüística.
-competencia pragmática: conocimiento de los principios y reglas que rigen la adecuación del comportamiento lingüístico a la finalidad comunicativa y que permiten determinar los significados inferenciales de los enunciados.

--Para pedir ayuda, los hablantes disponen de distintas fórmulas, entre las que eligen en virtud de su intención comunicativa: Te pido que me ayudes / Ayúdame / Podrías ayudarme / Que me ayudes

-- Dicha durante la cena, la siguiente pregunta se interpreta como una petición cortés: ¿Tienes la sal cerca? La siguiente frase también recibe una interpretación no literal ¿Es que no tienes ojos en la cara?...

-competencia sociolingüística: conocimiento de los principios y reglas que rigen la adecuación del comportamiento lingüístico a factores extralingüísticos (formalidad de la situación, relación con el interlocutor, entorno de la comunicación, factores culturales, etc.).
Por ejemplo, el sistema lingüístico del español peninsular nos proporciona dos formas diferentes de dirigirnos al interlocutor: y usted. Las condiciones en que resulta adecuado utilizar una forma u otra no dependen del conocimiento de la gramática, sino de las prácticas que cada comunidad haya hecho habituales. Por consiguiente, además de interiorizar una gramática mental o competencia gramatical, los hablantes adquieren también un conjunto de pautas y de rutinas de comportamiento verbal que determinan la adecuación de su producción lingüística a cada situación comunicativa concreta, y que constituyen su competencia sociolingüística.
Conocer o “saber” una lengua implica por tanto construir oraciones gramaticales (competencia gramatical) y apropiadas (competencia pragmática y sociolingüística). Los dos tipos de competencias tienen en común constituir un conocimiento interiorizado que es parte de la mente de cada individuo y que se adquiere en un entorno de socialización. Al conjunto de las competencias pragmática y sociolingüística se le ha denominado competencia comunicativa.
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