descargar 7.07 Kb.
|
La celiaquía. Dicho así parece de difícil comprensión. Pero si hablamos de enfermedad celíaca, intolerancia al gluten, de dietas sin gluten, seguro que todos los oyentes lo entenderán. Recordemos que la enfermedad celíaca es el resultado de una intolerancia al gluten que es una proteína existente en las harinas de trigo, centeno, cebada y avena. El problema es que mucha gente puede pasar años y años siendo intolerante a estos alimentos y no tener un diagnóstico claro. Los pacientes celíacos deambulan por varias consultas hasta que alguien les hace un diagnóstico correcto. Se trata de un diagnóstico que no es fácil de hacer por 2 motivos: uno, que la atención desde la consulta del médico de no siempre es la suficiente por el tiempo que se dispone y la variabilidad de casos que por allí pasan. Otra es que esta enfermedad es muy peculiar porque tiene distintas manifestaciones y unos síntomas muy difusos como la diarrea que se da en muchos otros casos. Hay una serie de factores que pueden favorecerla como los genéticos, ambientales como la proteína del gluten y del centeno y también unos aspectos inmunológicos que pueden influir en la presentación de esta enfermedad en las personas. Existen distintas formas de manifestaciones de esta enfermedad: existe la clásica con síntomas de mala absorción y alteraciones en el intestino; existe la enfermedad monosintomática que es la más frecuente en edad adulta y en la pediátrica y que puede cursar con síntomas tanto intestinales como extraintestinales. La enfermedad celíaca silente en la que no hay unas manifestaciones clínicas pero que en el intestino existe una alteración; la enfermedad celiaca latente que existe una alteración de la mucosa, en concreto en el duodeno y en el yeyuno y en la que los individuos que toman gluten en su dieta no les ocurre nada pero tienen unos anticuerpos. El factor hereditario es un componente a tener muy en cuenta. Hay dos grupos de riesgo; el primero serían los familiares con enfermos celíacos y pacientes con otras enfermedades que se asocian a la celiaquía. Dentro de los familiares, los que corren riesgo son los de primer grado. También las enfermedades autoinmunes, las tiroiditis e incluso la diabetes. Existen una serie de pruebas diagnósticas que permiten asegurar que el paciente es celíaco. Se trata de unos marcadores que se hayan por medio de un análisis de sangre. Pero en ocasiones, estos anticuerpos no están presentes y es necesario realizar una prueba como la biopsia de duodeno y yuyeno y la que dará un diagnóstico definitivo. La alimentación en la que no haya unas proteínas como las del trigo, centeno y demás y excluyendo eso el paciente se vuelve asintomático. No se cura la enfermedad pero se controla y el paciente empieza a aumentar peso, está menos cansado, no tiene diarreas... (Extraído y adaptado de: www.vivir mejor.es). 1.- Establecer el concepto de Salud implícito en el fragmento anterior. Justificar 2.- Si se tiene en cuenta el contexto de la frase: “No se cura la enfermedad pero se controla…” ¿Concuerda con el objetivo del modelo? ¿Por qué? 3.- Concebir al cuerpo del ser humano como una máquina, la enfermedad como un daño a la máquina y al médico como al mecánico que la repara. a) ¿A qué característica corresponde? b) ¿Cómo repararía el médico la problemática del artículo según el modelo biomédico? c) Comparar la reparación con el modelo biopsicosocial, teniendo en cuenta el objetivo del mismo. |